A la hora de plantearnos el trabajo de una lengua extranjera en Educación Infantil, tenemos que considerar las características psicoevolutivas de los alumnos/as de estas edades y su particular modo de aprender.
A continuación explicaremos cómo vamos a abordar la enseñanza del inglés desde cada una de las Orientaciones Metodológicas:
1. Enfoque globalizador y aprendizaje significativo: A la hora de abordar la enseñanza del inglés en Educación Infantil, debemos considerar la forma en que los niños/as de estas edades perciben la realidad y es de forma global.
Trabajaremos las diferentes capacidades: físicas, cognitivas y socio-afectivas de manera interrelacionada, considerando las tres áreas de conocimiento y experiencia.
2. Atención a la diversidad: Es muy importante considerar nuestro grupo como heterogéneo, aceptando las diferencias entre los alumnos/as: sus intereses, motivaciones, ritmos de aprendizaje, estimulación familiar respecto al inglés, etc.
3. El juego, instrumento privilegiado de intervención educativa: Toda actividad que se proponga debe tener un carácter lúdico. Se trata de que vayan descubriendo el inglés de un modo natural y el estado natural de los niños/as de estas edades es el juego. De esta manera aprenderán el inglés divirtiéndose, sin darse cuenta.
4. La actividad infantil, la observación y la experimentación: La actividad es la manera natural de aprendizaje para los niños de estas edades, por lo que las actividades que propongamos deben tener un carácter participativo y activo.
5. La configuración del ambiente: Marco de la intervención educativa: Debemos crear en el aula un ambiente de confianza y seguridad donde el niño se sienta animado y predispuesto a producir una lengua extranjera sin miedo a los errores y sin presiones. Aunque no comprendan todo lo que decimos, la entonación transmite nuestra actitud y ésta siempre debe ser de cariño, afecto, comprensión y tolerancia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario